La razón #1 por la cual la mayoría de adultos jóvenes fallan desesperadamente en controlar los problemas de ira (¿Estás cometiendo este error?)

¿Qué es la ira y por qué te debería de importar aprender a manejarla? Las probabilidades de que ya tengas una respuesta para estas preguntas son altas puesto le diste click al título y te pusiste a leer el artículo, al menos estás claro de que se trata de un importante asunto que necesita ser solventado.

Si te interesa acompañarme por un poquito más de tiempo puede ser que te diga un par de cosas que en la sumatoria te ayuden a resolver el enigma. Pero más importante aún, te voy a enseñar a como revertir esta mala situación.

La ira es una emoción, básicamente podemos estar claros en eso. La cuestión es que como muchas otras emociones tiene un propósito, no es inherentemente mala como a muchas personas les gusta presumir que es. Sin embargo sigue construyendo una mala reputación. Si alguien te describe como una persona enojada no suena realmente como un piropo ¿Verdad? Mientras, que si fuesen a describirte como una persona feliz eso sí que te haría sentir bien sobre ti mismo y permitiría que la gente alrededor tuyo se forme una opinión positiva sobre ti.

La cuestión es que la felicidad es un estado de ser no es simplemente una emoción efervecente. Este estado de ser es el anfitrión de muchas otras emociones, como la tristeza y el enojo. Sí, el enojo también es parte de estar feliz; como mínimo es parte de ser productivo. Si alguien te hace un daño y tú no te enojas ¿Cómo se supone que tu cuerpo va a saber reconocer el peligro entonces? ¿Cómo va a saber tu cerebro que necesitas protección? El enojo tiene un propósito, te ayuda no solo a protegerte del peligro sino también a evaluar situaciones en las cuales tus derechos están siendo violados y así presentándote con la oportunidad de crear mejores límites para ti mismo para que puedas crecer como ser humano.

¿Cómo va a saber tu cerebro que necesitas ser protegido?

Siempre y cuando el enojo esté cumpliendo esta función para ti, entonces tú tienes una relación saludable con esta emoción. ¡Brindemos a tu salud!

Usualmente son nuestras parejas los que reciben nuestra ira

Pero entonces, sí que le diste click a ese precioso título, así que debés de estar en busca de respuestas. Esta es la situación, el enojo se convierte en un problema cuando es tan fuerte que tú no puedes frenar lo que sientes, cuando parece que no puedes impedir la sensación de querer pegarle a alguien o a algo. La bestia es tan poderosa que te hace ciego. Al principio puede que se trate de un evento aislado y luego vuelve a suceder otra vez y luego una tercera vez hasta que termina convirtiéndose en un romance cotidiano y antes de que te des cuenta, la gente ya te tiene apodos y entonces la cuestión ya no es tan cute ni chistosa.

Puede que tratés de ignorar el hecho de que está ocurriendo y que de alguna manera va a desaparecer solito. O puedes pedir disculpas inmediatamente. Tú podrías prometerte que NUNCA más vas a estallar así e incluso podrías hacerte sentir mal y castigarte por haber sido grosero con el que sea el que tuvo la suerte de recibir tus insultos. Verás, esto te hace sentir como que estás arreglando la situación y probablemente así parece por un segundo hasta que se vuelve a repetir.

Tú continúas encontrándote con gente estúpida por todos lados que pareciera que tienen talento para sacarte de quicio, tocan cada pieza de tu mal humor como si se tratase de Mozart al piano. Cada argumento que tienes con tu pareja parece ser una invitación a que uses tu arsenal más peligroso. Y ni siquiera tenés que estar acompañado para pelear; incluso solo puedes sentir el odio rondándote. Y justo ahí es donde vive tu error #1.

Verás, dicen que reconocer que tienes un problema es el primer paso y no es como que estén equivocados, pero podrías por favor decirme ¿Cuál es entonces el problema? Sí, sí, has dicho que te enojas con facilidad, no entiendo porque eso es tan importante. Sí, peleas con gente que busca pelear contigo, eso es normal. Sí, la gente te irrita ¿Qué con eso? No me vas a decir que no hay gente irritante en este hermoso mundo.

Entonces ¿Cuál, te pregunto otra vez, es el problema? ¿No lo ves todavía? Ese es tu error. Ves enojo por todos lados pero no estas realmente viéndolo. Solo sabés que está ahí. Así que sí, tú explotas, tú te disculpas, tú te sientes culpable, prometes que vas a ser bueno, a sentirte más feliz, que vas a controlar la bestia, te bañas en unicornios y dulces esperando que de alguna manera eso te conduzca a la morada de los ositos cariñositos en donde vas a vivir feliz para siempre. Ahí está tu error otra vez.

¿Alguna vez has visitado al doctor con la expectativa de que te ayude a curarte de una extraña enfermedad sin que te examine para asegurarse de entender cuál es la causa del problema? Voy a asumir que tenés un buen doctor y que él conduce una buena evaluación antes de tratarte.

Eso es brillante…para un niño de 3 años.

Tú, por otro lado, supones que porque eres enojado debes dejar de serlo. Eso de hecho es brillante, para un niño de 3 años. Eres alguien enojado, gran cosa, ¿Por qué estás enojado? ¿Qué estaba pasando? ¿Qué estabas haciendo? ¿Estabas solo? ¿Qué estabas pensando cuando comenzaste a sentirte increíblemente enojado?

¿Qué? ¿No hay respuesta? ¡Qué sorepresa! Simplemente no entiendo como no has podido manejar tu ira con ese plan maestro tuyo que incluye básicamente nada más que decir “Fuck, me siento enojado, debo dejar de sentirme así”

¿Cómo vas a solucionar tu problema si no estás consciente de lo que lo causa? Ese es tu error, no sabés, piensas que lo sabés, pero realmente no has hecho el trabajo. Debes volverte consciente de tu ira. No simplemente volverte consciente de que estás enojado, pero consciente de las causas que la provocan.

Verás, puede parecer como que mucha gente es estúpida, como que todo mundo te está atacando, como que todo lo que haces con tu pareja es pelear. Pero eso puede no ser verdad. No es todo mundo los que te provocan, no es todo el tiempo que te sentís atacado o que estás peleando con tu novia, algo está pasando durante esos momentos que está generando que te sintás de esa manera.

Usualmente la gente que lleva un diario tiende a sentirse mejor y a prevenir la ira porque al tener un mecanismo de ventilación para sus pensamientos y sentimientos permiten que su percepción salga a jugar. Se sumergen en el juego de auto-exploración por medio del cual pueden recuperar control del enojo al entender lo que la causa, incluso si no saben que eso es  lo que están haciendo.

Si deseas realmente empezar a controlar tu enojo en un forma verdadera y duradera, debes practicar awareness (el ejercicio de la autoconsciencia). Hay muchos ejercicios para ello allá afuera, bueno al menos eso asumo, pero tú puedes empezar por escribir lo que odias. Simplemente déjalo salir. Trata de escribir acerca de lo que te está molestando. Escupilo. No tiene que ser una novela de Doestoievsky, solo escribe con quién estás enojado, como se siente ese enojo y tus pensamientos al respecto. Incluso si lo deseas, te lo voy a hacer más sencillo. Yo tengo una excelente herramienta que te ayuda a desarrollar habilidades de control al aprender técnicas de awareness. Solo dame tu correo y te lo enviaré. Es mi regalo para ti así que no te preocupés por nada.

Te prometo que una vez comencés a practicarlos vas a sentir que controlar tu ira no es una meta lejana, es algo realista y alcanzable para ti. Te aseguro que la calma y el auto-control pueden ser tu realidad pronto. Hasta entonces, te deseo un excelente día. Y si no es mucho pedir mandame una foto tuya practicando con los videos que te estoy enviando. Cuando terminés comentá abajo con tu foto y experiencia.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

eleven − 1 =